La Policía Nacional informó la detención de Daniel Moisés Cordero Rodríguez, de 30 años, quien según la entidad admitió estar involucrado en el hecho violento que provocó la pérdida de su madre y de su hermano la mañana de este sábado en la comunidad de San Felipe, Villa Mella, Santo Domingo Norte. La información fue confirmada mediante un comunicado oficial difundido horas después del suceso.
Las personas que dejaron de existir fueron identificadas como Anatalia Rodríguez, conocida como “Morena”, de 60 años, y su hijo Pedro Daniel Cordero Rodríguez, llamado “Pedro”, de 29 años. Ambos fueron encontrados alrededor de las 8:50 de la mañana dentro de su vivienda ubicada en la calle Respaldo La Gloria, donde las autoridades verificaron lesiones producidas por acción violenta en la región craneal, acompañadas de fracturas.
La Policía detalló que las primeras indagatorias indican que las víctimas habrían sido impactadas mediante una acción violenta con un objeto contundente. Estas versiones, todavía sujetas a verificación, señalan que el joven habría actuado en un contexto asociado a tensiones familiares. No obstante, las autoridades insistieron en que la información continúa en fase preliminar y que el proceso investigativo sigue abierto.
El comunicado establece que la persona señalada se presentó de manera voluntaria al destacamento N-1 de la Policía Nacional, donde expresó haber realizado la acción violenta contra sus parientes. Tras esta declaración, fue detenido inmediatamente, y posteriormente se notificó a las unidades investigativas y al personal de la Policía Científica para los pasos correspondientes dentro del protocolo institucional.
Un familiar cercano de la mujer que dejó de existir manifestó que el detenido había salido de prisión hace aproximadamente cinco meses por un caso relacionado con vulnerar físicamente a una persona, y que, desde entonces, mostraba un comportamiento inusual.
“Me llamó mi sobrina. Yo no pensaba que fuera tan fuerte, con pérdidas. Duró como 5 años preso y hace unos meses que lo soltaron, pero no salió muy bien de la cabeza de esa cárcel”, dijo el familiar, quien dijo que le había advertido a su hermana (la difunta) que al responsable del daño debía llevarlo con un psicólogo.
Durante la inspección de la vivienda, el equipo de la Policía Científica recopiló dos barras de hierro ensangrentadas, una con empuñadura de madera y otra parcialmente doblada, las cuales se presumen como objetos utilizados en la acción violenta que derivó en la pérdida de ambas personas. Dichos elementos fueron asegurados como parte del proceso de análisis que se llevará a cabo conforme a los procedimientos establecidos.
Los cuerpos fueron trasladados al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) para estudios correspondientes, con el objetivo de determinar con precisión detalles médicos asociados al suceso. Mientras tanto, el detenido permanece bajo custodia policial y será presentado ante el Ministerio Público para los procesos legales pertinentes, conforme a lo establecido por las leyes dominicanas y el curso de la investigación en desarrollo.
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