Nandri Antonio Fernández Muñoz, residente en Villa Riva, negó rotundamente las acusaciones de ofensa de género presentadas en su contra. Fernández fue señalado ante las autoridades por el hermano de su pareja, Albairis Sosa, tras un incidente que, según su versión, fue un conflicto familiar ajeno a la violencia machista. El imputado se encuentra actualmente bajo custodia mientras las autoridades continúan con las investigaciones correspondientes.
El hombre explicó a este medio que mantiene una buena relación con su pareja y que el altercado se originó por una fuerte discusión con el hermano de la mujer, cuya identidad no fue revelada de inmediato. Fernández Muñoz sostiene que el incidente no tiene relación alguna con actos violentos hacia su pareja, sino que responde a tensiones previas con el familiar de esta.
De acuerdo con el relato presentado por Fernández Muñoz, el familiar de su pareja fue quien lo arremetió, y la posterior acusación de violencia de género constituye un mecanismo para perjudicarlo, producto de conflictos familiares previos entre ambos. El imputado insiste en que la denuncia tiene motivaciones ajenas a los hechos reales y busca desacreditarlo ante las autoridades judiciales.
El imputado afirmó que su pareja, Albairis Sosa, lo defendió durante el suceso y en todo momento, respaldando su versión de que no hubo ofensa en su contra. Fernández manifestó textualmente: «Ella me defendió. El problema fue con él y él me arremetió. Esta acusación es totalmente falsa». Con estas declaraciones, el detenido busca demostrar que el incidente fue un conflicto entre él y el hermano de su pareja, sin involucrar violencia hacia la mujer.
En sus declaraciones ante los medios, Fernández Muñoz hizo un llamado directo a las autoridades competentes, solicitando una investigación exhaustiva del caso. El imputado pidió que, antes de tomar cualquier decisión legal, se escuche la versión de su pareja, ya que considera su testimonio crucial para demostrar que la denuncia se basa en una disputa entre cuñados y no en violencia intrafamiliar.
Las autoridades judiciales deberán evaluar todas las versiones presentadas, incluyendo el testimonio de Albairis Sosa, para determinar la veracidad de los hechos denunciados. El proceso legal permitirá establecer si las acusaciones corresponden a un acto violento contra la mujer con discapacidad motora o si, como sostiene el imputado, se trata de un conflicto familiar mal interpretado. El caso se encuentra en etapa de investigación y próximamente se definirán las medidas judiciales correspondientes.
