Ciudadanos dominicanos residentes en Jamaica describen escenas de destrucción total y desesperanza que dejó el impacto del huracán Melissa en la isla caribeña. Los relatos de los afectados reflejan la magnitud de la devastación que ha dejado a cientos de personas sin vivienda, alimentos ni pertenencias básicas para subsistir en medio de la emergencia que atraviesa el territorio insular.

“Estamos en la calle y todo, podemos decir que nuestras casas se desbarataron. No tenemos nada, estamos desamparados. Gracias a Dios que ustedes han llegado, por lo menos nos dan un aliento“, expresó visiblemente afectado un dominicano residente en Jamaica. Sus palabras transmiten la angustia de quienes han visto partir en cuestión de horas el patrimonio construido con esfuerzo durante años de trabajo en territorio jamaiquino.

Cientos de personas expresaron que lo perdieron todo tras el paso del fenómeno atmosférico, entre ellos decenas de dominicanos que formaban parte de la comunidad establecida en diversas zonas de la isla. “Fue algo catastrófico, no tenemos nada“, relató un dominicano desde Montego Bay, una de las zonas más golpeadas por los vientos y lluvias del huracán Melissa. Las imágenes muestran estructuras colapsadas y escombros que evidencian la fuerza destructiva del meteoro.

Los dominicanos afirmaron que el huracán Melissa destruyó sus viviendas y los dejó sin alimentos, pertenencias ni documentos personales. La pérdida de documentación representa un desafío adicional para los afectados, quienes deberán iniciar procesos de reposición mientras enfrentan la urgencia de satisfacer necesidades básicas inmediatas. La situación se torna especialmente compleja para quienes residen en el extranjero y requieren mantener su estatus migratorio regularizado.

También explicaron que resultaron destruidos hoteles, restaurantes y estaciones de servicio en las zonas turísticas y comerciales donde muchos de ellos laboraban. “Miren nada más cómo están los hoteles, los restaurantes, la gasolinera. Todo aquí está desbaratado“, añadió uno de los afectados al describir el panorama de devastación en el sector. La destrucción de estos establecimientos comerciales representa además la pérdida de fuentes de empleo para la comunidad.

“Se nos dañaron los documentos, se nos dañó todo. Lo más importante es que tenemos existencia, pero no tenemos nada. Se fue todo“, contó otro afectado que se refugia junto a su esposa e hijo en medio de las precarias condiciones posteriores al desastre natural que ha marcado profundamente a la comunidad dominicana en Jamaica.
