Ambiorix Rosario García, reconocido dirigente del movimiento estudiantil de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), finalmente logró obtener su título en Medicina después de más de tres décadas de permanencia en esa casa de estudios. La obtención del título coincidió con la celebración del aniversario institucional de la universidad, marcando un hecho singular en la historia académica de la institución por la extensa trayectoria del nuevo profesional.
Rosario García es recordado por su activa militancia dentro del movimiento estudiantil universitario y por haber ocupado la presidencia de la Federación de Estudiantes Dominicanos (FED). Desde la década de 1990, su figura estuvo asociada a distintas jornadas de reivindicación universitaria, en las que participó defendiendo intereses estudiantiles. Durante ese período, enfrentó suspensiones y medidas disciplinarias que, según sus declaraciones, tuvieron motivaciones políticas.
“Fuimos sancionados varias veces, alrededor de siete años en total, pero nunca dejamos de luchar”, expresó el recién graduado al recordar los años dedicados a su formación y participación dentro de la UASD.
El exdirigente explicó que su prolongada permanencia en la carrera no fue resultado de falta de empeño académico, sino de su compromiso con las causas colectivas. En sus palabras, “cuando uno confronta con intereses, esos intereses terminan pesando más que la justicia”, frase con la que resumió las dificultades encontradas a lo largo de su trayecto universitario.
Durante su gestión como presidente de la FED, impulsó propuestas como la elección del rector mediante voto estudiantil, la implementación de servicio de Internet gratuito en el campus, acciones para enfrentar el acoso académico y solicitudes de mayor transparencia en la administración de los recursos de la universidad. Estas iniciativas formaron parte de una agenda de transformación orientada a fortalecer la participación del alumnado en las decisiones institucionales.
Tras más de treinta años desde su ingreso a la UASD, su graduación simboliza el cierre de un extenso proceso de perseverancia personal y compromiso social. “Nunca es tarde cuando hay voluntad y deseo de superación”, manifestó Ambiorix Rosario García, reflejando el valor de la constancia y el esfuerzo en la búsqueda de sus metas académicas.