El Centro Nacional de Huracanes de Miami (NHC, por sus siglas en inglés) informó que la tormenta tropical Melissa incrementó la fuerza de sus vientos la tarde de este sábado, convirtiéndose en un huracán categoría 1. De acuerdo con el reporte de las 2:00 de la tarde, el fenómeno se encontraba en la latitud 16.6 y longitud 75.2, con vientos máximos sostenidos de 75 millas por hora, desplazándose lentamente hacia el oeste-noroeste a una velocidad de 1 milla por hora.
El pronóstico del organismo meteorológico advierte que Melissa experimentará una rápida intensificación y podría alcanzar la categoría 4 antes de tocar tierra en Jamaica. Los especialistas señalan que el vórtice del huracán se aproximará o pasará sobre el territorio jamaicano a inicios de la próxima semana, generando condiciones meteorológicas adversas en amplias zonas de la isla.
“El movimiento lento de Melissa traerá un período de varios días de vientos dañinos y fuertes lluvias que comienzan esta noche, probablemente causando inundaciones repentinas catastróficas, numerosos deslizamientos de tierra, daños infraestructurales extensos, cortes de energía y comunicaciones de larga duración, y aislamiento potencialmente prolongado de comunidades”, advirtió el NHC.
Las proyecciones indican además que el sistema podría impactar el oriente de Cuba durante la madrugada del miércoles, con precipitaciones que alcanzarían hasta 12 pulgadas en algunas regiones. En tanto, el Departamento de Meteorología de Bahamas informó que las islas del sureste y centro del país, así como Turcas y Caicos, podrían registrar condiciones de tormenta tropical o de huracán a comienzos de la próxima semana.
Las autoridades de Jamaica comunicaron que todos los aeropuertos del país cerrarán en un plazo de 24 horas si se emite una alerta de huracán. También se han habilitado más de 650 refugios y se preparan paquetes de alimentos para su distribución inmediata en caso de emergencia. “Pido a los jamaicanos que se tomen en serio este fenómeno climático. Tomen todas las medidas para protegerse”, expresó el primer ministro Andrew Holness.
En República Dominicana, Melissa provocó daños en cerca de 200 viviendas, afectó el suministro de agua de más de medio millón de personas, derribó árboles y semáforos, y generó pequeños deslizamientos de tierra que aislaron a más de dos docenas de comunidades.
Melissa es la decimotercera tormenta nombrada de la actual temporada de huracanes del Atlántico, que se extiende del 1 de junio al 30 de noviembre. La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos había anticipado una temporada más activa de lo habitual, con entre 13 y 18 sistemas con nombre.