Santo Domingo, Distrito Nacional.– A las 7:00 de la mañana del viernes, José Luis Biloria de Jesús, de 29 años, estuvo involucrado en la pérdida de Elianni Rodríguez Puello, de 21 años, en el sector Guachupita del Distrito Nacional, donde ambos habían procreado un hijo.
Familiares y vecinos de la joven habían insistido en diversas ocasiones para que pusiera fin a la relación, debido a los constantes conflictos y episodios de violencia que se producían entre ambos. “Él le llegó a causar muchos traumas, le hacía moretones en los ojos; yo le decía que lo dejara, pero no valió de nada”, expresó entre lágrimas Análisis Lucía, quien se identificó como prima de la fenecida.
De acuerdo con los residentes de la zona, las discusiones eran frecuentes y notorias para todos los que vivían cerca. “A cada rato se escuchaban las peleas, a cada rato… Él incluso le causaba compromiso respiratorio en presencia de los niños”, relató una vecina que prefirió mantener su identidad en reserva.
Según el testimonio de otra allegada, la joven manifestaba su descontento con la relación, señalando que su pareja la controlaba y limitaba sus salidas. “Ella decía que estaba cansada porque él no la dejaba salir, no quería seguir con él, pero de todos modos regresaba”, comentó.
Biloria de Jesús había iniciado la relación sentimental con Rodríguez Puello cuando esta tenía aproximadamente 17 años de edad. El suceso tuvo lugar en una modesta vivienda ubicada cerca de la avenida Francisco del Rosario Sánchez, en un punto conocido por los lugareños como “Jarro Sucio”. De acuerdo con los reportes, el interior del lugar presentaba señales de violencia, y parte de la ropa y calzado de los menores estaba manchada de sangre.
Tras provocar la pérdida de su pareja, Biloria de Jesús intentó causarse una lesión en el cuello con el fin de provocarse su pérdida, sin embargo, miembros de la Policía Nacional llegaron al sitio de manera oportuna y lo trasladaron al hospital Moscoso Puello, donde permanece recibiendo atenciones médicas.
“Si él queda con vida, queremos que se haga justicia, porque lo que hizo fue una injusticia muy grande”, expresaron entre sollozos los familiares de la joven, mientras observaban cómo su cuerpo era trasladado hacia el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif). Las autoridades mantienen abierta la investigación para esclarecer por completo los hechos y determinar las medidas judiciales correspondientes en torno al caso.