San Cristóbal, R.D. – Un hecho ha generado gran conmoción en el sector Quita Sueño del municipio de Haina, luego de que las autoridades confirmaran el hallazgo de dos personas sin vida, relacionadas sentimentalmente en el pasado. El suceso, ocurrido el viernes por la noche, ha despertado múltiples preguntas entre los vecinos y familiares de las víctimas.
La primera en ser localizada fue Judith Claribel Carela Cueva, una mujer de 47 años, quien según reportes fue encontrada en un solar entre matorrales. De acuerdo con las versiones ofrecidas por su familia, ella había acudido al lugar tras recibir una invitación de su expareja, Teodoro Ventura Labegar, de 58 años, con quien mantuvo una relación de más de dos décadas. Según dijeron, él le habría solicitado encontrarse allí para mostrar el terreno a una persona interesada en comprarlo.

Los agentes que acudieron a la escena reportaron que Judith fue encontrada en condiciones sospechosas, y cerca de su cuerpo se identificaron varios objetos personales, incluyendo una sombrilla y algunas fotografías de niños. Todo este material fue recogido por las autoridades para análisis forense, como parte del proceso investigativo.

Horas después, en una vivienda ubicada en la calle Mella del mismo sector, fue encontrado sin signos vitales el señor Teodoro. Su propio hermano fue quien descubrió la situación al llegar a la casa y de inmediato dio aviso a las autoridades.
Según vecinos del lugar, ambos eran figuras conocidas y la noticia ha causado mucha tristeza. Aunque llevaban cerca de seis meses separados, no se había reportado ninguna situación reciente que indicara tensiones graves entre ellos. Los residentes describieron a la pareja como personas tranquilas y dedicadas a su entorno.
Los restos de Judith están siendo velados en la Funeraria Emilio Guante, en Quita Sueño, donde decenas de personas se han acercado para acompañar a la familia en este momento tan difícil. La atmósfera es de pesar y reflexión, mientras muchos aún intentan entender cómo llegaron a este desenlace.
El caso permanece abierto y las investigaciones continúan en manos de las autoridades competentes. Se están revisando cuidadosamente los indicios recogidos en ambos escenarios, con la finalidad de esclarecer lo que ocurrió realmente y determinar si hubo factores externos o personales que llevaron a este trágico desenlace.
Los oficiales encargados insisten en que cualquier persona que tenga información útil sobre los hechos puede acercarse de forma confidencial a colaborar con la investigación. En tanto, la comunidad sigue pendiente del desarrollo del caso, esperando respuestas claras y respetando el proceso.