El grado de inundación de una mina de carbón del norte de México donde 10 mineros llevan 4 días atrapados está descendiendo. Las cámaras que fueron introducidas en los pozos el fin de semana mostraron que no hay obstáculos para “maniobras subsecuentes”, mencionaron las autoridades el domingo. Empero aún se desconoce en qué momento van a poder descender los buzos para res catarles.
Los parientes de los mineros cada vez se desesperan más, pues las posibilidades de encontrarles con vida se están reduciendo. Los trabajadores quedaron atrapados el miércoles por la tarde en el municipio de Sabinas, en el estado norteño de Coahuila. Una vez que ocurrió un derrumbe en su mina.
Los hombres se toparon con un área contigua llena de agua, que al venirse abajo causó la inundación de 3 pozos. De los 15 mineros que se encontraban haciendo un trabajo en el instante del derrumbe, solamente 5 lograron salir y avisar a las autoridades.
Pasadizos inundados
Los pozos contiguos, de 60 metros de hondura, permanecen comunicados por pasadizos que quedaron inundados con 34 metros de agua. La sustracción de la misma ha sido bastante lenta, ya que, como mencionó el sábado la secretaria del Trabajo de Coahuila, Nazira Zogbi, a medida que la sacaban, por un lado, se filtraba, por otro lado.
El gobierno del estado señaló en un reportado el domingo que se habían instalado grupos de bombeo de mayor capacidad y se estaban perforando barrenos, en uno de los cuales ya se había instalado una bomba adicional, con lo cual el flujo de sustracción de agua se había “incrementado de forma significativa”. La nota no especifica cuántos metros había bajado el grado.
Las familias, impacientes y cada vez más agotadas por la carencia de noticias de sus seres queridos, esperaban el domingo la llegada del mandatario Andrés Manuel López Obrador, que tenía previsto ir al sector por la tarde, según hizo saber.
Intentaban aferrarse a la esperanza de que sus seres queridos continúen vivos. “Los que alcanzaron a subir y conocen el lote, mencionaron que había una bolsa de aire en (una región llamada) la Campana. Entonces, si (el agua) los arrastró para el lado de la Campana, hay esperanza”, afirmó el viernes por la noche Blanca Rivera, que tiene 2 primos en la mina.
Centenares de rescatistas de diversas entidades —militares, policías, voluntarios, académicos— participan en el operativo
Centenares de rescatistas participan en el operativo en México
Centenares de rescatistas de diversas entidades —militares, policías, voluntarios, académicos— participan en el operativo. Los mineros que laboran en esta clase de pozos acostumbran a laborar sin medidas de seguridad y sin mapas, y a lo largo de las excavaciones frecuentemente se topan con paredes de minas antiguas que acostumbran a estar llenas de agua, por lo que son comunes dichos accidentes.
Entre junio y julio del año pasado se registraron derrumbes en 2 minas de Coahuila en los cuales perecieron 9 mineros; sin embargo, el peor infortunio de la historia reciente de México ha sido en 2006 en la mina Pasta de Conchos, donde fallecieron 65 mineros gracias a una explosión. Solamente se recuperaron 2 cadáveres y lo demás sigue bajo tierra.
