Un pescador de nacionalidad brasileña fue rescatado, tras haber estado varado en el Océano Atlántico durante 11 días; el individuo estaba ya sin alimentos y deshidratado, logrando sobrevivir flotando en un congelador.

El pescador sería identificado como Romualdo Rodrigues, quien partiría desde el norte de Brasil en un bote de madera, para pasar tres días en actividad. En el periodo de navegación, se estrellaría y provoco que se hundiera la unidad; lo que género que se resguardará en un congelador.

Romualdo derivó durante días en el Océano atlántico, siendo recogido por un barco que pasaba cerca de la zona.

El individuo sería encontrado a unos 400 kilómetros del lugar en que se estrelló su bote (Surinam); donde al llegar al puerto más cercano, sería arrestado, por considerarse un inmigrante ilegal.

En el momento que los rescatistas lo dejaron subir a su barco, se toparon con que el pescador presentaba quemaduras y con un vendaje blanco en los ojos para resguardarse del sol.